jueves, 10 de abril de 2008

La Carta del Obispo


El Obispo de San Bernardo, Juan Ignacio González, que suele vestirse con faldas para sus rituales de adoración, polemizó esta semana con sus dichos: acusó al Gobierno de "usar a los pobres" (al parecer, su arcaica institución no acepta la libre competencia).
"A los pobres hay que enseñarles, pero no hay que usarlos, como los está usando la autoridad para decir que no van a poder usar esto. Dejen a los pobres tranquilos."

Luego de carcajear por la desvergonzada ironía de sus dichos, quedé perplejo por lo que viene a continuación:
"Si (la píldora) es abortiva nadie puede usarla".

Con este anexo a su contradictorio argumento, el representante de esta retrógrada institución que adora divinidades, se alejó del tema en el cual es experto (las supersticiones cristianas) y deslizó una insinuación sobre temas que le competen a la ciencia, su enemiga, esto es, ¿es la píldora abortiva?. Aunque no lo crean, lejos de las supercherías de los fundamentalistas católicos, los parlamentarios UDI / RN y las viejas pechoñas, hay gente que sí ha estudiado la píldora, que sí ha llegado a conclusiones y, Señora Obispo, la píldora NO ES ABORTIVA.

Aunque para la manga de supersticiosos una célula tenga más vida que el delincuente que esperan dejar como colador cuando se les meta a su casa, aunque confundan coito con embarazo, aunque para ellos la siguiente conducta abortiva por penalizar sea la masturbación, incluso aunque consideren el orgasmo femenino como un mito, la píldora NO PRODUCE ABORTOS. La principal causa de abortos, Señor Obispo del Opus-Dei, es el embarazo. Y es eso lo que evita la pastillita. Prohiban la pastilla, criminalicen la T de cobre, y ahí si que van a conseguir verdaderos y sangrientos abortos, pelotudos Pro-vida.. o debería decir "pelotudos Pro-aborto".

Y que los viejos asexuados que se disfrazan de princesita gorda para celebrar sus misas se dediquen a lo que saben hacer: a cagarles la vida a sus feligreses que van a escucharlos, a esclavizar a los pobres con sus promesas de dioses, vírgenes milagrosas y represión sexual. ¿Qué tenemos que ver el resto con sus creencias ridículas? ¿acaso nos metemos nosotros con su retorcida a-sexualidad? ¿creen que porque violan niños que no pueden embarazarse, los métodos anticonceptivos no les hacen falta?. A nosotros, los adultos con sexualidad normal, si nos hacen falta: mantenemos relaciones sexuales por gusto, de común acuerdo, porque es rico, porque la disfrutamos, y, a diferencia de sus fanáticos, no nos interesa tener una guagua cada vez que lo hacemos. Esa es la sexualidad normal, no como la de Uds., lo hacemos por placer, no porque estemos desesperados con las exigencias de nuestro cuerpo y los niñitos no hablan, como Uds.

La verdad, es que investigué un poco y google me hizo reir con lo que encontré: una carta del obispo éste sobre la sexualidad. Seleccioné algunas partes que me parecieron irrisorias por provenir de un ignorante de la sexualidad y la vida en pareja. Lean cómo el caremonja González se imagina el sexo:

"Sin Dios, es decir desde una perspectiva sólo naturalista, de genero, se trata de levantar la falsa bandera de que toda persona y todo joven tiene derecho a satisfacer sus deseos sexuales, porque ellos forman parte de su naturaleza y no hay reglas pre-establecidas, ni normas morales, ni es posible para nadie erigirse en juez de estas situaciones y conductas."

"Se trata, eso si, de evitar a toda costa que de esas relaciones se siga al embarazo, que viene a ser una consecuencia molesta y amarga"

"A ello debe agregarse una falta de educación en la afectividad que hace que nuestros jóvenes no tengan elementos para descubrir como reaccionar frente a una enseñanza de la sexualidad más biológica que ética, teniendo todos estos procesos como telón de fondo la desaparición del matrimonio legal y el establecimiento de la mera convivencia como la regla general en las relaciones entre una mujer y un hombre."

"La verdad sobre el matrimonio ha sido rechazada por la ley y a tal llega el desprecio sobre la institución esencial de toda sociedad humana, que se está intentando la unión legal entre personas del mismo sexo como si fuera matrimonio."

"El asalto definitivo que se prepara es lograr convencer a la mujer que ella es la única dueña del ser que lleva en su seno y por tanto puede determinar legalmente quitarle la vida: es el aborto, un “crimen” - como lo llamó el Concilio Vaticano II – que termina quitando la vida al mas inocente de los seres y deja para siempre herida a una mujer."

"Cuanta fortaleza y audacia nos falta para oponernos a tanta insensatez y que caros pagaremos nuestros silencios, especialmente si no secundamos decididamente una verdadera cruzada a favor de la pureza, en contra de quienes creen que cada ser humano es un poco una bestia incapaz de vivir conforme a normas y principio morales."

"Desde nuestras palabras y acciones hasta nuestra forma de vestir han de ser expresión del respeto al cuerpo que es templo de Espíritu Santo."

"Otro aspecto de enorme gravedad e importancia para la libertad de la Iglesia y nuestra convivencia social es descubrir que la autoridad política quiere introducir en nuestra vida un concepto de no discriminación con el que pretende que la ley reconozca que las diferencias – sean cuales sean - nunca puede ser motivo de distinción, exclusión, restricción o preferencia arbitraria, concepto que presentado de manera suave y con sagacidad quiere decirnos que una persona que elige una condición sexual contraria a la naturaleza humana, (homosexualidad, lesbianismo, etc,) no puede por esa razón ser excluido en cualquier ámbito que sea y que quien e cualquier manera haga algo que pueda hacer que una persona se sienta discriminada por esta razón y otras cometería un delito que se crea y se agrega al Código Penal."

"El Proyecto en cuestión fue redactado e impulsado con el apoyo del los grupos homosexuales a fin de que quienes tienen esa condición se conviertan en un grupo protegido legalmente contra cualquier tipo de “discriminación” y toda especie de “menoscabo” en razón de su “orientación sexual”."

"Sin temores, unidos en la comunión de una misma fe, de unos mismos sacramentos y guiados por los pastores de la Iglesia, presididos todos por el Vicario de Cristo, nuestro Papa Benedicto, demos alegremente las batallas por la defensa de los derechos de Dios y de los cristianos que nos han sido encomendados, sabiendo que en el camino no nos faltara la cercanía, el consuelo maternal y el impulso de la Madre de Jesús, María, cuyo mes estamos celebrando."

"Por su parte la Conferencia Episcopal española se vio recientemente en la necesidad de salir al paso de un nuevo programa educacional impuesto por el gobierno socialista de Rodríguez Zapatero, el cual, siguiendo el mismo concepto de no-discriminación, hizo obligatoria en los colegios la materia, “Educación para la ciudadanía y los derechos humanos”. Tal asignatura incluye temas como “preferencias sexuales, estereotipos que se reciben en la propia familia” y “conflictos éticos en el comienzo y en el final de la vida”, o sea, aborto y eutanasia."

Y no sigo leyendo porque, aunque no lo crean, hay gente que cree lo mismo que el charlatán transvestido que escribió esto.

Ahora, la pregunta interactiva:

El Obispo de San Bernardo, Juan Ignacio González escribió esta carta:

a) En la navidad de 1397
b) Mientras quemaba a unos herejes, en 1520
c) En las pascuas de resurrección 1663
d) En Noviembre del 2007, bajo los efectos del silicio.
e) No la escribió: Dios se la pasó en el monte.
f) No es del Obispo: corresponde a una rutina de Alvaro Salas.

¿cuál es la respuesta?